No me toques las bartolinas

Hay gente a la que le gusta debatir sobre política antiterrorista (muy de moda últimamente), del panorama de nueva revolución "socialista" latinoamericano, de la última eliminatoria de Operación Triunfo, de la criba de Capello en el Real Madrid... y a mi me parece de perlas. Que la gente hable de lo que le de la gana, pero sobre todo que hable. Que la comunicación entre los humanos es muy importante (y no lo digo porque me dedique a ello) sino porque es verdad. Si se tercia, yo también hablo de estas cosas... ¡que no se diga! Una es periodista, que es la profesión más seleccionada por los miembros de mi familia después del taxi. Nos va la marcha. Dos de las profesiones más vilipendiadas por la opinión pública. Básicamente por lo mismo: por hablar de todo sin saber de nada.
Pues eso, que yo en estos temas sólo intervengo si no hay más remedio. Más que nada por ignorante. Si me dan a elegir, francamente me siento mucho más cómoda hablando de filosofía. De filosofía de la calle. De la castiza. No vayamos a llamarnos a engaño. Y de ciencia, también... de ciencia sin conciencia. Por ejemplo, ayer sin ir más lejos el tema al que dediqué mi debate vespertino de domingo pre-cine fueron la glándulas bartolinas. ¿Sabéis lo que son? Yo no tenía ni idea y eso que son muy importantes. Son dos glándulas situadas a cada lado de la vagina. Secretan una substancia de mucosidad que desemboca por medio de conductos al vestíbulo y al surco que separa los pequeños labios del himen. Es decir, son las responsables de la lubricación. O sea, importantísimas. Y si no qué se lo pregunten a la del anuncio de Vaginesil. La pobre, que la sacan con una cara que con sinceridad no resulta verosímil para hablar de relaciones sexuales.
Las glándulas bartolinas, de Bartolo (supongo), son dos. Cosa rara teniendo en cuenta que solo hay una oquedad que lubricar. Claro que también hay dos testículos y un solo pene... ¿Por qué? Es un misterio de la naturaleza. Lo que me lleva a una reflexión metafísica sin precedentes -en mi, claro- (Nótese el elegante cambio de ciencia a filosofía). Cuál es la causa última de que de algunos órganos tengamos dos y de otros uno. Quizá se trate de un residuo evolutivo... puede que en un primer estadio los humanos tuviésemos dos vaginas y dos penes... Lo que parece claro es que allí donde hay un agujero único, llámese boca, ano o vagina, a todos les da por meter lo mismo...
Según los veo ahora, mis pensamientos escritos, me da bastante miedo percibir que mis neuronas prefieren dilucidar sobre la posibilidad de que el hombre prehistórico tuviese dos pollas que sobre la crisis de estado. En fin, todavía estoy a tiempo de hacerme taxista.
13 comentarios
Rider -
Besos mil!
Yuriy -
Rider -
Ángel -
Rider -
My Sharona, la profesión docente es un poder social muy influyente.
Bartolino, prefiero dos penes a dos cartucheras... No hay color!!
Ángel, para pasar las hojas del periódico mejor eyacular hacia dentro ;-)
Ángel -
Bartolino -
ReBeCa -
Realmente, nunca pense en mi joven vida q después de estar estudiando derecho penal me reiría tanto. Perfecta explicación sobre las glándulas bartolinas pero no estaría mal que la gente se interesase más sobre la política ya que los jóvenes de hoy (gracias a dios que no estoy metida en ese grupo) son apolíticos y asi pasa...que me veo gobernada por el franciscano de Rajoy. Pero no me quiero meter en política y tampoco quiero hablar de Capello que me enciendo asi que únicamente decirte primi...que vas mejorando tus publicaciones y que yo me largo a estudiar.
BeSiToS!
Sarita -
Asi que da por hecho que no volvera a haber desconocimiento acerca de las gladulas bartolinas. Sera de lo primero que enseñe, algo asi como antiguamente el Padre Nuestro.
Gracias sister.
Rider -
Tienes razón, Siniestra... la cosa va de fluidos.
Sirc, mientras no me dedique a disertar sobre la posibilidad de que tengas tres tetas no tienes nada que temer...
Sirc -
siniestra cuando quiero... -
Grooveman -
Genial.
Siempre fui un gran amante de la metafísica...
Deberías seguir potenciando esta vena filosófica, aunque -eso sí- cuando quieras te doy unas clases intensivas de interpretación de planos...